Los otros correos

Tras la fecha importante quedaron algunos correos, frases sueltas que nunca se concretaron y menos llegaron a su destino. Aquí es donde se les hará justicia y al menos se les dejará tener un destino menos cruel que el olvido. Es muy probable que al estar inacabados tengan más fuerza o tosquedad que aquellos que si fueron enviados, tal vez por eso es que prefiero omitir los destinatarios.

Me desespera que me des tantas vueltas en la cabeza… Como si no hubiera sido suficiente decepcionarme por el pasado, ahora el presente también me lo estas nublando… Nada me inquieta más que la curiosidad de saber cual es tu opinión de mi ahora. Incluso he pensado hablar para arreglarlo, pero definitivamente es solo consecuencia de mi presente situación. Así como muchas cosas más, es preferible sepultarte de una vez y para siempre.

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Tendría que haber pensado que la amistad entre ustedes significaría que fueran similares… Pero bueno enfocándome solo en ti creo que debo hacerle caso a mi intuición y dejar que la vida siga su curso. No hay necesidad de forzar algo que ya hace mucho que siento acabado. Y es que hay dos cosas: la falta de seriedad y la poca profundidad que le das a las cosas. No es pedirte que seas de piedra, pero creo que la madurez te volvería alguien realmente interesante. Hasta que eso no suceda, prefiero no seguir esperando, más aun cuando todo es tan insípido.

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Un implicado más. Pareciera que todo en esa parte de mi vida esta condenado al fracaso. Y mira que este me duele mas que los dos casos anteriores. Tan bueno que pudo haber sido el contacto, tan cálido y constructivo, pero no. Mi maldito deseo de adaptar todo a mi manera tuvo mucho que ver. Y luego mi miedo a la ofensiva me hizo defenderme con el mas jugoso de los cebos. No lo percibí hasta que me despedí, y después de eso veo difícil que nos tratemos de la misma manera. Tanto por tu ambición como por mi preocupación, es tan difícil que vuelva esa época donde la platica simple amena nos bastaba para pasar el tiempo… Cuanto lo siento.

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Es obvio que aun no me has superado. Una frase fuerte para comenzar, y es que no se me ocurre la manera de hacerte caer en la cuenta que no hay posibilidad para lo que deseas. Admito que no debí haber hecho contigo lo que quería hacer con alguien más, por muy inocente que esto fuera. Pensé que aclarar las cosas sería suficiente, pero la manera en que me hablas me dice que no surtió efecto. Me siento mal por ser responsable de un sentimiento que no puedo corresponder.

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Con estos últimos encuentros me pregunto como terminará todo esto. La verdad es que poco a poco me he divertido mucho a tu lado, aunque a veces no pueda llevar el ritmo de conversación que acostumbras. Definitivamente es bonito hablar, salir y eso… pero no sientes que hace falta algo más para que cuaje el asunto? No es ser atrabancado ni nada, solo pienso que algo de contacto espontáneo no vendría nada mal. Ojalá y las cosas sigan por el camino que van ahora y dentro de un año podamos celebrar doce meses de dulce amistad.

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Claro que no podía faltar, la niña que siempre me deja pensando… Aún en esa semana no atiné a decir que sería de la relación. Y es que desafortunadamente las circunstancias nublaron la posibilidad de llevarnos mejor. De vez en cuando hay un nuevo intento, cosa que te agradezco mucho, con todo y que no he sabido corresponder muy bien que digamos. Tal vez haga falta algo más convincente que un café. Con este horario esta algo complicado pensar que será posible, pero tengo fe en que algún día cercano las cosas se darán. Sé que el destino nos cruzó por algo, lo que quisiera saber es porqué. Vale la pena descubrirlo no?

De momento es todo. Definitivamente son frases inconclusas, palabras que salieron de muy dentro y aún no consiguen tomar toda su forma. Aun así las escribo con la esperanza que hagan más bien que mal. Crípticas como están, estoy seguro que si alguno de los destinatarios lo lee sabrá que es para él.