por pasarse de preguntón
a la muerte colmó el plato
y se ganó un calentón.
“Tú te pasas de indiscreto
ni que fueras periodista.
Por ser disque analista
ya no me tienes respeto.”
“Para mí que fue tu orgullo
el que salió mal herido
y además de ofendido,
me quieres hacer chanchullo.”
“No te me pases de listo
que sorprendo al que me pise,
no por nada siempre dicen
que soy lo más imprevisto.”
Flaca, yo na’ más te digo
que aunque ya esté en mi tumba
con gusto bailo contigo
una rumba de ultratumba.
Catrina no se contuvo
y le soltó un guadañazo.
Así el pobre nunca supo
de dónde vino el trancazo.
Y es así que por la buenas,
bien flojito y cooperando,
se murió sin una pena,
el pequeño Alejandro.
Mientras duraba el velorio
mucha gente fue pasando
a desearle un buen descanso
evitando el purgatorio.
Luego entre muchas tumbas
la flaca iba festejando
que aunque pálida y huesuda
otro llevó al camposanto.
Pero el necio empedernido
que no era nada bromista
recordó lo prometido
y a bailar sacó a Catrina.
Ahora que ya he fallecido
y te encuentro más canija…
¡De tí no me he arrepentido!
¡A tupirle al baile mija!
jajajaja! ya te metieron un kalenton XD
ResponderBorrarme encanto! y estoy totalmente de acuerdo... tu saka a bailar lo ke se te ponga enfrente al fin y al cabo lo bailado kien nos lo kita
y ke si te ponen un kalenton como a mi lap, ps en la bailada te deskitas kon un arrimon jajajaja