Día memorable

Mágico. Único. Memorable. Creo que jamás me he sorprendido más por alguna obligación. Después de todo ese pebetero trajo más beneficios que el punto extra.

Creo que fue bueno desde el principio. Jamás planée que me acompañaras, tampoco pensé que aceptarías. Solo lo dije por decirlo. Pero tu hiciste la diferencia.

Fingir ante mi madre que eres mi novia... Para ti fue un juego, para mí un cumplido. Interpretaste demasiado bien tu papel, tanto que yo me lo creí, pero luego recordé la realidad... Que no eres más que una amiga. Aún así tu mano en mi cabeza, acaraciandome, luego la oreja... Creo que no hay mejores manos para mí que las tuyas. Tomar tu mano, acariciarla. ¿Qué mas puedo pedir? ¡Inlcuso le caíste bien a mi madre! ¡Incluso te vio bien! Eso definitivamente significa algo.

Llegamos. Fue más gente de la necesaria. Creo que mañana va a haber chisme de esto. Pero no me interesa, para mí solo estas tú.

Entramos a trabajar, los dos solos. No sabía si seguir lo que en el camino sucedió. ¿Como distinguir si el juego no era sólo ficción? Tímido como siempre, me escondí en el trabajo y en mi puesto de líder para no apenarme más. Aún así hice el propósito de mejorar con el tiempo.

Debo admitir que más allá de los beneficios para mis sentimientos por tí, fue una excelente idea haberte llevado. Me facinó la manera en que hiciste cada uno de los diseños, como con maestría y paciencia fuiste haciendo uno por uno. Aún más rápido que yo, y eso que yo soy el autor. Es digno de reconocer que eres alguien muy capaz y en quien yo veo muchas cualidades y posibilidades. Por un momento te vi a ti como la líder.

Llegó la pizza. El dinero era lo de menos. Que tu me dieras de comer en la boca vale mucho más que eso. Que yo te diera de comer tambien... Sin palabras. Por un momento realmente te vi como a mi novia. Por un momento pensé que podía quitarte la pizza de un beso... Comer de tu boca.... Pero tenía que ser respetuoso...

Luego seguimos. Era increíble como es que haces tan bien las cosas. En serio que vales mucho. Cada dibujo, la paciencia para tratar con todos, conmigo. La soltura. Si ya te amo por cosas aún más pequeñas, hoy solo pude confirmar lo obvio.

Llego la hora de irse, pero quedo la puerta abierta para un nuevo encuentro. ¡Que me interesa lo que hagamos mientras esté contigo! En el camino a casa, estar recostado en tu brazo, tener tan cerca tu cara... ¿Por qué no te besé? Porque sé que habrá una oportunidad mejor... Tal vez más pronto de lo esperado.

Es curioso que hasta entonces haya habido una mención de tu novio. No e spor ser malicioso pero espero que cada vez tarde más en salir a la conversación.

¿Que más puedo decirte? ¿Te amo? Creo que ya te lo dije. ¿Te espero? Creo que es obvio que eso voy a hacer. ¿Un beso? Eso no se dice, eso se hace.